Entrevista a la Dra. Andrea Zumar, Vicepresidenta de CASMU
¿Por qué afirma CASMU en general y especialmente la 1727 son una parte central de su vida?
Porque este es mi segundo hogar y aquí se encuentra también mi familia. Entré como médica a 1727 un 8 de abril del año 2009, en un móvil de asistencia vital básica que salía como supernumerario desde el mismo local donde era el economato y la mesa de comunicaciones. Desde ese día trabajé casi en exclusividad para CASMU – 1727 (desde 2016 lo hago en exclusividad).
En 1727 conocí a mi esposo y padre de mis dos hijas (Sofía y Julieta). Aquí también tengo a mis grandes amigos y mis hijas conocen y han sabido jugar en varias de las bases de salida cuando en alguna ocasión me han ido a buscar.
Siempre afirmé que es la mejor Emergencia Móvil y lo que le hacía falta era el impulso y el marketing necesario.
¿Qué cambios impulsó desde el Consejo Directivo?
Desde nuestra llegada al Consejo en 2019 supimos que era el momento de llevar adelante las ideas que veníamos gestando a través de años de trabajo, gracias al estudio académico, el diálogo permanente y la experiencia directa en la atención. Nuestra mirada siempre fue integral, para la mejora de CASMU, pero la particularidad de nuestra trayectoria, hizo que hiciéramos foco en el desarrollo de la Emergencia 1727. Creemos que es importante que este espacio ganado, continúe en el próximo período.
Trabajamos y logramos impulsar y promocionar la marca. Esto se hizo gracias a muchas acciones, entre ellas la insistencia para que el logo de 1727 estuviera presente en las gráficas y banners de CASMU.
En todos los espacios que nos tocó actuar como parte de la directiva, argumentamos para que la Emergencia del CASMU fuera visible y fortaleciera la imagen de nuestro servicio asistencial. Hoy, todo el merchandising de CASMU aparece con el logo de la 1727. Eso no es casualidad, es fruto de una visión profesional de fortalecimiento de marca (donde destaco el papel jugado por Sebastián Castillo), que comunica las mejoras que se construyen en la acción concreta.
Para ejemplificar este proceso de mejora, queremos destacar dos acciones que marcaron el impulso de la 1727:
Primero, fuimos protagonistas en la concreción del aumento del número de móviles y los recursos humanos. Esto permitió tener una mayor y mejor flota. y disminuir las demoras, aumentar las áreas de coberturas y ganar importantes licitaciones (como la que hace que seamos la Emergencia del Antel Arena.).
Lo segundo que queremos destacar es que cuidamos la renovación de la flota total de vehículos. Fuimos protagonistas en la redacción de los contratos (donde resalto el aporte del Dr. Moldes) de unidades pensadas para mejorar la asistencia de los pacientes y las condiciones de trabajo. Atendimos especialmente el confort (de ahí que los todos los móviles tuvieran 4 puertas y aire acondicionado) y la seguridad (ploteado con la marca 1727, la señalización como móvil médico y el rastreo de GPS).
¿Qué desafíos cree que hoy deben pensarse para avanzar?
Creemos que en el futuro inmediato es fundamental el desarrollo, dentro del Departamento de Capacitación, de un plan específico de formación permanente que atienda las características del área prehospitalaria. Este proyecto debe abarcar al conjunto del personal: telefonistas, enfermeros, choferes y médicos. Por las características de atención fuera de los centros médicos, sabemos de las necesidades específicas de este equipo de trabajo que debe tomar decisiones urgentes y precisas en contextos de tensión. Creemos estratégico el armado de una propuesta de capacitación que atienda específicamente a todo el personal de 1727.
Otra línea de trabajo a seguir impulsando es la promoción de salud en la comunidad, continuando y profundizando los talleres de RCP, primeros auxilios y el trabajo con instituciones educativas (donde destacamos el aporte del Equipo de Medicina Sexual que ha generado un proyecto único en Uruguay, de educación sexual a niños, docentes y familias).
Desarrollando roles de gestión, siguió trabajando en la asistencia ¿por qué?
Porque amo mi profesión y entiendo que mi aporte a la gestión se ve siempre enriquecido si sigo trabajando en territorio: atendiendo pacientes, escuchando a los colegas, sintiendo directamente los logros y los desafíos que faltaban por resolver.
Soy joven y estoy en una etapa de mi carrera donde quiero y debo estar en la primera línea de batalla.
Estoy agradecida de todo lo vivido y especialmente de estos 13 años, donde crecí profesionalmente, construí vínculos profesionales e hice muchos amigos.
Voy a seguir trabajando en un modelo de gestión que está convencido que solamente se pueden liderar los cambios con procesos que tienen historia y trayectoria. Seguiremos construyendo con el respeto y el cariño de todos los colegas. Somos consciente que los liderazgos no se decretan, sino que se van edificando desde la confianza, el diálogo y la obtención concreta de resultados.