El desafío de una atención personalizada y cercana a cada uno de nuestros afiliados.
Entrevista a la Licenciada María Susana Álvarez
Supervisora del Área Pre Hospitalaria de Enfermería.
¿Qué cambios se están instalando para la mejora del servicio y la atención al paciente?
En CASMU se están programando muchísimos cambios. Desde la renovación de la flota de móviles, hasta la reorganización del Economato de la 1727. Apuntamos a una pronta certificación en Calidad, para esto, trabajamos con los procesos y procedimientos para poder certificar los procesos de trabajo en el Economato.
Se están reorganizando los recursos humanos, dejando el personal fijo en cada área para que se fidelice con el móvil, con los insumos y pueda trabajar más cómodamente (que no rote tanto). Esto va a hacer que la persona tenga claro cuál es su móvil, dónde están los implementos y cómo tiene que trabajar para poder salir rápidamente a asistir a los usuarios y tener una buena respuesta, rápida y efectiva.
¿Esto repercute positivamente en la atención al usuario?
Por supuesto. La mejora de los móviles y en los procesos, obviamente va a repercutir en la calidad de asistencia al usuario al permitir hacer todo mucho más rápido. Además, va a ser mucho más efectivo porque no le va a faltar nada. Se optimizarán los tiempos y se seguirá asegurando que estén presentes todos los insumos necesarios y que cada equipo funcione al máximo de su potencial. Esto permitirá seguir avanzando en la rapidez de nuestra asistencia.
¿Qué significa el desarrollo de una medicina “pre hospitalaria”? ¿Cómo incide en la calidad de vida en general y de atención en particular, en cada paciente?
Ante la aparición del COVID, la medicina pre hospitalaria cobró mucho auge y mucha trascendencia. Junto a ello, hoy además de la 1727, tenemos la internación domiciliaria y los cuidados paliativos (estamos hablando de casi 300 pacientes que están en sus hogares). Allí diariamente hay un equipo de enfermeros que salen a asistir a esos usuarios, a darles la medicación en tiempo y forma, lo que hace que se funcione en forma muy similar a una internación en sanatorio. La medicación se da de mañana, de tarde y de noche (el servicio funciona desde las 6:00 de la mañana hasta las 12:00 de la noche).
Después tenemos el área de la emergencia 1727, que esa área es para urgencia y emergencia (desde Solymar hasta Paso de la Arena), que incluso se articula con la internación domiciliaria y los cuidados paliativos en aquellos pacientes que se descompensan, o que requieren un apoyo mayor. Enfermeros y médicos se comunican inmediatamente con la 1727 y se conforma un todo para que la asistencia al paciente sea óptima.
Al estar en su propio hogar ¿mejora la calidad de vida del paciente?
Por supuesto. El usuario, estando en internación en el sanatorio, se desarticula él y todo su entorno. Los costos aumentan para la familia porque hay que trasladarse, alguien tiene que acompañar a ese paciente, se incrementan los gastos en alimentación y hasta esa persona que acompaña, tiene pérdidas de horas laborales. Ese conjunto de elementos cambia cuando el paciente está en el domicilio.
La internación domiciliaria permite una optimización de recursos desde los dos lados: el paciente y la institución. El paciente en su domicilio a su vez está mucho más cómodo, contenido, está con su familia, está en su medio, entonces se siente más seguro. Sabe y espera que un enfermero vaya a darle la medicación o vaya a curarlo en el momento que lo necesita. Eso a su vez genera un vínculo muy productivo entre la familia y el personal de la salud. Se construye una relación de confianza que permite que el enfermero entre en su casa y es el nexo entre la institución y el paciente.
Puede decirnos, en una mirada a dos o tres años, ¿Qué servicios vamos a fortalecer en 1727, de forma de mejorar la calidad de vida de todos los usuarios?
De aquí a dos años yo espero de la 1727 que estemos Certificados y que podamos seguir renovando la flota. Espero que crezcamos, tanto en afiliados como en otros servicios que ya están ganando socios y espacios, como zonas de coberturas y áreas protegidas Cada vez tenemos más trabajo.
Esta mayor demanda de trabajo exige mayor demanda en los procesos y en los insumos. Nos exige prepararnos más y estar más acordes con la realidad que se nos viene.
Nos exige mucho trabajo, pero de la mano de la organización de los procesos y la construcción de protocolos, será sin duda, más fácil. Planificar, proyectar, dirigir, ejecutar… ese es el desafío.
Veo un gran futuro para la 1727, posicionándose fuertemente en el mercado. Creo que el COVID nos dejó esa impronta, esa visión activa como ciudadanos y como uruguayos, de lo que es la 1727 y hacia dónde vamos.
Equipo de Comunicación 1727 Emergencia Móvil | CASMU IAMPP